Friday, October 19, 2007

EDUARDO LEYVA, MI AMIGO MERCENARIO

A la derecha, Mont Saint-Michel.



Cuando era niño a principio de los años sesenta allá en Cuba, la Invasión de Bahía de Cochinos de 1961 por cubanos del exilio era conocida como La Victoria de Playa Girón, y a aquellos hombres agrupados en la Brigada 2506 los llamaban “mercenarios”. Así se enseñó (e imagino se siga enseñando) dicho suceso en las escuelas cubanas y se divulgó (como todavía se hace) en la prensa nacional.

En 1989, caminando por las callejuelas del Monasterio de Mont Saint-Michel, en la Costa Altántica francesa, escuché que de un grupo de turistas hablando en inglés se escapaba un “coñooooo”; enseguida me viré y le dije al señor de marras: “Usted es cubano”. Aquel hombre alto, bien vestido y de muy buena dicción me respondió con mucho orgullo “si, soy cubano, y luché en la Bridaga 2506”. Sin pensarlo dos veces, y por ser el primero que veía en mi vida, exclamé lleno de asombro: “¡Un mercenario!”.

Fue la última vez que dije aquella palabra, porque meses después tuve la oportunidad de conocer a varios de ellos y así aprendí la historia que nunca nos enseñaron en Cuba, contada por los propios protagonistas de la Brigada.

Incluso, uno de ellos llamado Eduardo Leyva –ya fallecido- fue una persona cercana a mi en una etapa de mi vida. Eduardo fue por muchos años jefe de redacción de la revista Cosmopolitan en español, uno de los hombres más culto que he conocido a quien le debo el placer de las Carminas Buranas, gay, excelente amigo y uno de los muchachos más jóvenes (si no el más joven pues sólo tenía 16 años) que participó en la invasión de Bahía de Cochinos.

Recuerdo a Eduardo ahora. Y pienso en esa isla llamada Cuba que hasta está a punto de perder su nombre.

1 comment:

Anonymous said...

verdad que es super raro, yo nunca he conocido a ninguno y ahora es que me doy cuenta que quisiera un dia conocer a uno para que me cuente su historia
llevo muy poco tiempo en Estados Unidos